Midnight in Paris

Director: Woody Allen

Intérpretes: Owen Wilson, Rachel MacAdams, Kathy Bates

En un entorno tan sugerente como es la ciudad de Paris, Woody Allen nos sumerge en un mundo paralelo en el que el personaje protagonista, un escritor americano del siglo XXI, enamorado de la ciudad y del amor, con una relación y una vida que dista mucho de la felicidad tal y como él la entiende y la sueña, se encuentra dulcemente perdido en el tiempo con pintores, escritores, editores, de los que destaco nuestros paisanos Dalí y Buñuel, que son participes de una de las situaciones más divertidas de la película, cuando el protagonista les explica que un coche le recoge todos los días a las 12 de la noche, y lo reúne con intelectuales y artistas de la talla de Hemingway, Scott Fitzgerald y Toulouse Lautrec y les cuenta que esto le resulta extraño, porque dice “Vosotros sois surrealistas pero yo, soy normal“.

Las situaciones cómicas, los diálogos brillantes y los ambientes teatrales de ese mundo paralelo hacen de la película una comedia romántica muy dinámica que culmina con un final de cuento de hadas. Final criticado por algunos con los que la he comentado por ser demasiado feliz pero que a mi me encantó, ya que prefiero los finales: chico conoce a chica muy mona que aparece de manera fugaz durante toda la cinta y persigue su sueño que un final como, protagonista es internado en un sanatorio mental por alucinaciones crónicas. Cuando vi la película sentí envidia del protagonista y puedo decir que no seré yo la que si se encuentra una de estas noches en una tesitura similar, corra al psiquiatra a la mañana siguiente. 

Pilar Z