El Camino de Santiago

El camino de Santiago es pulpo, es queso de tetilla, es ribeiro, es alegría, es cansancio, son ampollas. Es preguntarse qué hago aquí, es levantarse por la mañana y decir “no puedo más”, es acostarse con el peso de la mochila en los hombros y tener ganas de enfrentarse a la próxima etapa.
Es paisaje, es calma, es naturaleza, es silencio, son boñigas de vaca. Es sentir como el tiempo transcurre al ritmo de tus pisadas, a ratos alegres, a ratos pesadas, a ratos arrastradas pero sabiendo que hay un paso más que tus pies, tu cuerpo y tu mente pueden dar.
El camino es contarle un chiste a tu compañero de fatigas cuando las fuerzas le flaquean, es dejarse ayudar cuando lo necesitas, es reír por no llorar.
Con permiso de Quevedo, el camino “es un andar solitario entre las gente, un soñado bien, un mal presente”.
Es nostalgia de gente, de sensaciones que se fueron y no sabemos si volverán, es el calor de la gente que te quiere. Es disfrutar de las cosa pequeñas que nos da la vida, es compartir los momentos felices con los que te importan. Es coger el chupete de tu sobrina cuando llegas ante el santo y pedirle que la vida le trate bien.
Eso y muchas cosas más es el camino. No hay un sólo camino. Cada uno vive su camino. Hay tantos caminos como experiencias nos ofrece. Pero hay un nexo común: es un camino contigo mismo. No importa si vas sólo o acompañado, no importa los motivos por los que lo hagas, no importa el tramo por el que pases. Al final es un camino contigo, con tu mente, con tus debilidades, con tus miedos, con tu voluntad , con tu yo que te empuja.
El Camino es una experiencia.
MMP


12 comentarios:

Anónimo dijo...

Moni! me ha encantado como lo describes.... siempre tú..... con esa forma especial y nostálgica de contar las cosas.... me ha encantado de verdad... un beso guapa. MARTA CRUZ

Anónimo dijo...

Siempre tan renacentista y sorprendente...!!!! Me han emocionado tu relato, las fotos, la música y el chupete de tu sobrina...!!! BSBS MaiteQ

ASM dijo...

Por la puerta de la casa de mis padres pasa el Camino y siempre he pensado que un día saldría desde allí camino de Santiago. La verdad es que me imponen los 300kms que separan Astorga de la tumba del Apostol pero sé que un día lo haré. He conocido el Camino cd solo pasaba algun peregrino de vez en cd y no existia toda la infraestructura que hay ahora. Pero imagino que aun cd vayas rodeado de gente, el camino lo haces solo, lo haces contigo y con lo que te empuja a andar. Hablo de oídas, de lo que me contasteis a vuestro regreso y de lo que me han contado tantos vierners que tb lo han hecho. Este año iba a hacer la primera etapa con vosotras pero aun lamentándolo en esa fecha no podía. No creo que tarde en seguir vuestros pasos y así poder sentirlo en primera persona.

Maria Luisa dijo...

Me encantaría hacerlo, pero ya hace mucho que mi tiempo no me pertenece y no me puedo ni imaginar lo que sería tener 15 ó 30 días para hacer El Camino. Pero no pierdo la esperanza y confío con ilusión en que ese momento llegará.

ana dijo...

Tan bien descrito...! Recuerdo muy bien cómo salimos de Pierafita hablando sin parar y cómo R. preguntaba, ¿cuándo empieza el camino interior? y empezó en seguida. Cada una, hizo su camino. Eso sí, tuvimos que luchar contra el espíritu de Prisciliano, pero es impagable recuperar la tradición de la caminería medieval. Tienes un objetivo y caminas hacia allá día tras día. Merece la pena ser vivido!

ana dijo...

MMP, tu escrito me ha servido de inspiración y he preparado algo sobre el camino pagano, sobre Prisciliano, la vía láctea, Finisterre y el Juego de la Oca... Hoy se lo he contado a algunos amigos y ¡he reclutado varias personas para hacerlo, incluida una gallega! Núñez Feijoo me debe una! Tengo que deciros que en Canadá hacer el Camino es lo más "in"

Anónimo dijo...

La verdad es que yo pertenezco a ese "extraño" grupo de personas que no acaba de entender que encanto tiene pegarse una caminata de tal calibre no estando fisicamente preparado para ello, supongo que si es una promesa que te haces tras algo que ha ocurrido en tu vida tiene algun sentido pero si no... Tal vez deberia hacerlo y descubrir si merece la pena.

ana dijo...

Estoy segura de que hay que hacerlo para entender que no es necesaria la religión ni las promesas para disfrutarlo. Pero tal vez haya que estar predispuesto... Yo desde luego lo estaba!

RA dijo...

A mi me encantó hacer el camino, en un principio quería pensar muchas cosas y la verdad es que sin saber porqué mi mente estaba vacía, lo importante no eran los problemas sobre los que iba a pensar sino las rodillas,una cama,los pies etc... La verdad es que lo guay del camino es eso:" el camino" y aunque vayas con gente lo haces solo y me encantaba decirle a todos: "buen camino"...
RA

JAVIER dijo...

Supongo que no importa el motivo, tal vez hasta cambie con los kilómetros y el estado de ánimo de quien lo hace.
Yo tengo pensado un dia hacer algun tramo en plan "turista que camina" e intentar ver las cosas de modo diferente. Es una forma de ver las cosas demasiado prosáica? Creo que no. En la vida nos mueven muchas cosas y el viaje que se inicia con un objetivo se transforma con la experiencia, tal vez el turista se transforme en peregrino o tal vez no, tal vez se conozca a si mismo mejor al final o tal vez descubra un completo extraño.
Sólo por si mismo tiene el camino valor.

ASM dijo...

Pues por fin ya puedo decir que he hecho el Camino. Y considero que es una experiencia muy enriquecedora. Te enfrenta a tus límites físicos y mentales(no de manera extrema pero te exige mucho en ambos sentidos) desarrolla tu capacidad de observación, de disfrute de lo que te rodea.. y cd llegas...cd llegas es muy reconfortante alcanzar la meta y te pone en disposición para conseguir otras metas...
Con el tiempo, al echar la vista atrás, como muchas experiencias todavia gana.

Pilar Z dijo...

Que recuerdos!! Un gran camino el de aquel año. Grandioso paso por Astorga para encontrarnos con la redactora jefe de viernes